
Tu beso, aquel beso,
fue como el principio,
de mi bello sueño de amor,
se me fue la vida en un segundo,
y mi cuerpo se estremeció de ilusión.
Tu beso, aquel beso,
fue como la miel,
que endulzó mi solitario corazón,
haciéndome sentir un aire nuevo,
nadando en el oleaje de mi amor.
Tu beso, aquel beso,
fue como el arco iris,
que con sus colores alegró mi vida,
haciendome alcanzar la estrella más alta,
desde la cumbre de mi alma.
Tu beso, aquél beso,
fue como el fuego,
que toco mi fondo dormido,
mostrándome un mundo nuevo apasionado,
y de saber que por fin te he encontrado.
Tu beso aquél beso,
ya es tan mÍo como tuyo,
que se ama cuando se ama en realidad,
¿qué sería de mi, sino toco tu boca?,
se me iría la vida, pero esta vez de verdad.
Elieth.